Vía láctea desde Sad Hill

 

Cementerio de Sad Hill

Varios han sido los intentos, o mejor dicho, varias veces he salido ya este año a fotografiar la vía láctea con resultados bastante desnatados. Dicha escasez de resultados se debe en su mayoría a cierta experimentación en lo que a localizaciones se refiere. Una muestra en la entrada anterior a esta que fuimos a Urbasa a ver que nos encontrábamos.

Nos hemos encontrado también este año que el cielo no estaba por la labor y aún así hemos optado por desplazarnos como la noche que nos acercamos a los pozos de petróleo de Sargentes de la Lora.

Este fin de semana pasado tocaba ya mirar al cielo y elegir una localización con las condiciones idóneas que nos permitieran fotografiar la vía láctea. Escogimos el cementerio de la escena final de la mítica película de spaghetti western, El Bueno, El Feo y El Malo. El cementerio de Sad Hill.

Ya estuvimos el año pasado entreteniéndonos con una figura de Clint Eastwood de la que ya publiqué sus entradas correspondientes. Este año hemos vuelto principalmente por temas "logísticos" (recomendable hacer copias de seguridad de vuestras fotos cada poco tiempo) y por que el sitio mola.

Quizá Sad Hill no sea, fotográficamente hablando, una localización de una espectacularidad asombrosa, pero para aquellos que gustan rememorar aquellas películas del Oeste de los años 60, sin duda encontraran en Sad Hill una amalgama de sensaciones, sobre todo si es la primera vez que se visita.

Otra buena razón para el fotógrafo nocturno es la escasa contaminación lumínica que hace que ver el cielo nocturno sea un espectáculo majestuoso.

Respecto a las fotos que hicimos, la idea era repetir la foto de la figura de Clint con el árbol y la vía láctea, que con tanto esmero hicimos el año pasado. No obstante, al no ser mi disco duro el que decidió borrar varios meses fotográficos sin previo aviso (toco madera y seguido respaldaré de nuevo mi archivo), pensé en hacer algún otro encuadre.

Se me ocurrió la idea de tratar de alinear varias hileras de tumbas con los dos picos que se ven al fondo y a poder ser con la vía láctea encima. Esta última estaba más a la derecha de lo que había previsto. Las tumbas que están en círculo si que nos permite movernos para buscar esa alineación, pero esta es la parte de suelo que más fotogénica me resultó y a la que le dediqué un par de disparos. Después, regresé junto a mi compañero de fatigas para repetir la foto del año pasado.